jueves, 24 de mayo de 2007

sin titulo

Un día el hombre agoto los recursos naturales del mundo,
y en el mundo solo quedó hambre y dinero
alli fue cuando el hombre comenzo a comer dinero.

Los bancos se atestaron de hambrientos
y el hombre comenzó a beber agua de mar
todo lo que anteriormente era considerado como necesario
se transformó en fútil, excepto los libros, cuyo papel era
devorado por los intelectuales que quedaban.
ALgunos intelectuales prefirieron morir de hambre,
solo por amor al arte.

Los dueños del dinero fueron atacados por la plebe
que presa de una voraz locura mostró su lado mas violento
La nueva clase alta reunió libreros, bibliotecarios e intelectuales
La nueva fe encontró su biblia en el Don Quijote
transformandolo en un best seller gastronomico.

Y un día el dinero comenzo a menguar
los pocos hombres que quedaban comenzaron
a llorar y a pedir al cielo redención
y una de las últimas mañanas que quedaban
llovieron animales, semillas y agua dulce.
El hombre comprendió su idiotez
y se declaró en huelga de hambre
y así fue como los animales se reprodujeron
las plantas se extendieron a lo ancho del mundo
y el agua se fue uniendo en lagos espejados.-

1 comentario:

Anónimo dijo...

q peculiar es q los intelectuales tanto en el mundo contemporaneo, como en tu relato, se mueran de hambre.
ni en la ficcion la reflexion es redituable.
un abrazo.

Santiago G